Este museo al aire libre cuenta con una extensa colección de casas antiguas y una gran colección de barcos en los que los noruegos fueron hasta Canadá, la zona de Terranova, Rusia, Islandia, Groenlandia y Europa, es más, llegaron hasta Cádiz. ¡Imaginad lo duro que deberían haber sido esas travesías, surcando aguas gélidas en semejantes barcazas!Durante nuestro paseo, nos hacemos una idea de cómo era la vida y el trabajo de la gente durante aquella época, gracias a una gran colección de casas antiguas traídas de diferentes punto de Noruega y en bastante buen estado de conservación.
Se puede disfrutar de
un paseo entre las pintorescas casas con sus tejados cubiertosde musgo y plantas utilizadas como aislante en dicha época.
tamaño de las viviendas
y de las puertas que son diminutas, teniendo en
cuenta que los noruegos siempre han sido hombres
de gran tamaño.
Esto se debe a que, cuantos menos huecos tuvieran las casas, menos lugares tendría por donde escaparse el calor. Las ventanas también eran escasas ya que el vidrio era un lujo accesible a unos pocos. La casa de la derecha es una antigua escuela y podemos observar que cuenta con bastantes ventanas con vidrio, símbolo de riqueza.
La siguiente foto muestra una casa que debió pertenecer a gente adinerada.
Dentro del recinto, podemos encontrar una de las iglesias más antiguas de Aalesund, la Borgund Kyrkjen.
Gracias a Ángel, nuestro súper guía,nos enteramos de algo muy importante:"takk for alt" significa "gracias por todo", pero no se os ocurra utilizar esta expresión para dar las gracias, ya que sólo se usa en...¡¡¡los funerales!!! Si queréis ser agradecidos, con "takk" basta.
Para reponer fuerzas, hemos decidido probar algo de gastronomía noruega y hemos empezado por algo dulce. Tortitas o "svele", rømmegrøt, crema espesa y dulce típica de días festivos y los kanelsnurrer , o rollitos anudados de canela. Aunque este postre es muy popular en EEUU, son originarios de Escandinavia. Y para muestra, un botón.
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